La Organización Mundial del Comercio (OMC) ha reducido sus perspectivas de crecimiento de los intercambios comerciales globales en 2019, desde el 2,6% adelantado en abril hasta el 1,2%.
La organización, que ha actualizado su informe de perspectivas esta semana, ha atribuido esta caída a las crecientes tensiones entre las grandes economías como China y Estados Unidos o las dudas por el Brexit, también ha recortado sus previsiones de crecimiento para el año 2020 aunque en menor medida, del 3% adelantado hace seis meses al 2,7%.
La OMC ha reseñado en su página web que «las crecientes tensiones comerciales y el freno de la economía global han llevado a los economistas de la OMC a rebajar bruscamente sus perspectivas».
Roberto Azevedo, el director general de la OMC, ha explicado que «los oscuros nubarrones para el comercio son descorazonadores, pero no inesperados».
Además, ha agregado que «los conflictos comerciales producen incertidumbre, lo que lleva a muchos negocios a retrasar sus inversiones».
De acuerdo con lo que han comentado los expertos de la OMC, existen otros factores que también han llevado a la reducción de previsiones, incluyendo los cambios de política monetaria en las economías desarrolladas o las dudas en la Unión Europea ante la posible salida del Reino Unido con o sin acuerdo.
La OMC ha advertido en su informe que la prolongación de estas tensiones e incertidumbres podría traer como consecuencia un crecimiento de los intercambios aún menor, de sólo el 0,5% este año.
En el otro lado de la balanza aparece que una disipación de las dudas, como, por ejemplo, con un acuerdo entre China y Estados Unidos o una solución negociada a las tensiones en el Reino Unido, podría suponer un incremento del comercio del 1,6%.
La OMC es la única organización internacional que se ocupa de las normas que rigen el comercio entre los países. Los pilares sobre los que descansa son los Acuerdos de la OMC, que han sido negociados y firmados por la gran mayoría de los países que participan en el comercio mundial y ratificados por sus respectivos parlamentos. El objetivo es ayudar a los productores de bienes y servicios, los exportadores y los importadores a llevar adelante sus actividades.