Desde que el pasado jueves 26 de agosto saltasen todas las alarmas con la publicación por parte de Reuters de la contaminación de varios lotes de la vacuna de Moderna en Japón, todo han sido disgustos para Laboratorios Rovi, que ha tenido que pelear contra viento y marea para detener estos malos augurios y las fuertes caídas en su cotización.

Dos días después llegaba una nueva noticia, el Gobierno de Japón anunciaba el fallecimiento de dos personas que habían sido vacunadas con uno de los lotes contaminados de Moderna, aunque se desconocía la relación entre la vacuna y la causa de los fallecimientos. 

A última hora del día de ayer, Laboratorios Rovi junto a Moderna y Takeda publicaban un comunicado sobre la investigación de los lotes bloqueados de la vacuna Covid-19 de Moderna en Japón. 

Según dicho comunicado, tres lotes de la vacuna de la Covid-19 de Moderna fueron bloqueados tras los informes de los centros de vacunación sobre una posible sustancia extraña en forma de partículas observada en viales no utilizados de uno de sus lotes. 

Asimismo, Rovi asegura que la causa más probable de las partículas identificadas en dicho lote está relacionada con la fricción entre dos piezas metálicas instaladas en el módulo de tapones de la línea de producción debido a un montaje incorrecto, "las dos piezas son la rueda de estrella y la pieza del dispositivo de alimentación de tapones que introduce los tapones en la rueda de estrella".

Conforme al análisis realizado por ROVI, la incidencia en la fabricación sólo afectó a los lotes que han sido bloqueados. ROVI ha tomado las siguientes medidas para corregir y prevenir futuros defectos

  • Inspección completa de la línea de producción
  • Mejora del procedimiento operativo estándar para la sustitución de la línea de producción
  • Establecimiento de límites de alerta en los resultados de la inspección visual automática, como control interno de proceso.

Según el análisis independiente llevado a cabo por Moderna, la partícula del lote contaminado ha sido analizada a fondo y se confirma que se trata de acero inoxidable de grado 316. El grado 316 es un alto grado de acero inoxidable utilizado habitualmente en la fabricación y en el procesamiento de alimentos.

Según confirman en el comunicado, tras una evaluación sanitaria llevada a cabo de Moderna y Takeda, la rara presencia de partículas de acero inoxidable en la vacuna de la Covid-19 de Moderna no supone un riesgo indebido para la seguridad del paciente y no afecta negativamente al perfil beneficio/riesgo del producto, "las partículas metálicas de este tamaño inyectadas en un músculo pueden dar lugar a una reacción local, pero es poco probable que den lugar a otras reacciones adversas más allá del lugar de la inyección" y esperan que "la inyección de las partículas identificadas en estos lotes en Japón suponga ningún mayor riesgo médico".

Esta noticia ha hecho recuperar el valor de sus títulos a Rovi, que sube hoy más del 3% y se corona como el valor más alcista del Mercado Continuo. De seguir así en las próximas jornadas, Laboratorios Rovi podría recuperar los niveles que traía antes de que saltasen las alarmas con la vacuna de Moderna. 

Asimismo, aseguran que por el momento no hay evidencia de que los dos trágicos fallecimientos producidos a continuación de la administración de la vacuna de la Covid-19 de moderna estén relacionados con la administración de la vacuna, "la relación se considera, en este momento, casual".